En nuestro último análisis sobre la autosuficiencia en combustibles, mencionamos que una de las razones para que los “expertos” crean que es mejor que México siga comprando combustibles en el extranjero en lugar de desarrollar su propia industria de refinación, es la ARRAIGADA BAJA AUTOESTIMA MEXICANA.
Decimos esto porque en México, antes de 2018, se aplicó un modelo económico que se orientó al saqueo y que devastó al país. Los niveles de vida y bienestar bajaron mucho; la mayoría de los mexicanos no tuvimos opción y tuvimos que adaptarnos a la pobreza y la inseguridad. Por ello es válido hacernos la pregunta, ¿qué pasaba por la cabeza de los que impusieron el modelo?; los que aplicaron las reformas y vendieron al país, ¿por qué lo hicieron? ¿En qué estado psicológico estaban, para aceptar tanto daño a los mexicanos?
Claro que una de las razones fue la corrupción de este grupo que se creía dueño del país y que hizo grandes ganancias al privatizar los recursos y empresas mexicanas, pero hay más que eso. Lo más importante es que una parte de la población realmente se la creyó que era correcto el permitir que las empresas públicas del estado -que son de todos los mexicanos- pasaran a manos privadas y extranjeras, por eso repetimos las preguntas: ¿cómo lograron que una parte de la población permitiera y aceptara que le quitaran sus recursos y empresas nacionales? ¿Cuál fue la clave de la estrategia para convencer a los mexicanos de que no eran capaces de desarrollar sus empresas públicas y que era más conveniente que estuvieran en manos privadas y extranjeras? La respuesta es fácil: LA ARRAIGADA BAJA AUTOESTIMA MEXICANA.
Un ejemplo claro de esta falta de valor personal, de esta élite o grupo, está en haber aceptado entregar todas las riquezas de la nación a empresas extranjeras y privadas bajo el argumento de que las empresas mexicanas son incompetentes. Si lo razonamos es una proyección de baja autoestima, porque para creer que el petróleo debe de estar en manos de otros (léase extranjeros, principalmente) es necesario tener la convicción de que nosotros como mexicanos no podemos. Si le seguimos la pista a los argumentos de los que aún están en favor de eso, nos daremos cuenta de que todo gira en torno a esta idea.
Como ejemplos hay cientos de “expertos” argumentando que los extranjeros pueden hacerlo mejor o que los mexicanos somos corruptos e incompetentes y este choro es el pan de cada día en los medios corporativos nacionales cercanos a la élite mexicana del país. Por ello creemos que es importante analizar este tema con más profundidad. La arraigada baja autoestima mexicana es el enorme “elefante rosa” que no muchos nombran o quieren ver, pero que está ahí. Existe desde los tiempos de la conquista española y sigue ahí hasta el día de hoy y se volvió más grande en los años del periodo neoliberal.
ANALICEMOS ALGUNAS NOTAS DE “EXPERTOS” CON BAJA AUTOESTIMA MEXICANA.
La nota a continuación es ejemplar El problema del Tren Maya- Grupo Milenio, en ella obvio primero se denosta al Tren Maya, diciendo que es lento, que llega tarde etc. Pero lo más revelador es que dice que “existe un problema de origen” y agrega que “ninguna empresa mexicana tiene experiencia en redes ferroviarias” y además hace hincapié en que “mucho menos el ejército mexicano” y que los únicos con la capacidad están en Europa y Asia. Para remachar el ataúd de su autoestima moribunda expresa que la única razón por la que es viable es porque está “dirigido a el turismo”, el acomplejamiento eterno de las clases altas y sus expertos de que solo somos un destino de paseo, de que nuestro potencial son solo nuestras playas bonitas y nuestros recursos naturales, como si estuviéramos destinados solo a proyectos de este tipo y no al desarrollo industrial y tecnológico.
Aparte de la muy baja autoestima, para rematar el autor miente, pues menciona, mentirosamente, que el presidente no confía en empresas extranjeras, lo cual es falso porque para la construcción del Tren Maya se contrataron empresas privadas mexicanas como Carso de México, ICA de México, y también empresas privadas extranjeras como Mota-Engil de Portugal y Alstom de Francia. Pero lo que ocurre en el caso particular de la 4T, es que hay un cambio de visión, ya que es muy diferente que el Estado Mexicano contrate y coordine la participación de una empresa privada especializada para la construcción de un proyecto para de esa manera desarrollar el proyecto, obtener la tecnología y el conocimiento; lo cual es muy diferente a como era antes, que era solo vender o regalar los recursos y proyectos a las empresas privadas, sin verificación ni coordinación para que nada más hicieran dinero. Por todo esto parece que lo que quiere este autor y muchos otros es que las empresas privadas sean las dueñas de los proyectos y obras, debido a que ellas son las expertas por ser extranjeras; los mexicanos no podemos desarrollar esa industria en México, porque simplemente… ¿Somos incapaces por ser mexicanos?
Otro buen ejemplo es un artículo de Leon Krauze, mexicano quien ha trabajado para varios medios de comunicación estadounidenses y que al igual que otros “expertos” tiene maestría en una universidad de ese país - por New York University, explicaremos más adelante porque es importante ese dato -. En el artículo a continuación que él escribió, con sólo el título podemos ver que su intención es solo desacreditar esta importante obra de infraestructura nacional. Opinión | El nuevo, decepcionante y lejano Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles ya enfrenta varios obstáculos - The Washington Post.
También tenemos como ejemplo el caso de Javier Lozano en 2022 -Secretario del Trabajo y Previsión Social durante el gobierno de Calderón y conocido como el principal impulsor de la Reforma Laboral que eliminó derechos básicos de los trabajadores-, quien publicó en su cuenta de X: “En efecto. Muy orgullosos de haber demolido un aeropuerto de primer mundo -como lo era el de Texcoco- para dar paso a una pinche central avionera -el AIFA- digna de la mediocridad de la 4T”. P*nche central avionera: Javier Lozano se va contra AIFA (debate.com.mx). Lozano por cierto también estudió una Maestría de Comunicación Política y Gobernanza Estratégica en The George Washington University.
El trauma psicológico que sufren muchos de sentirse inferiores salió a relucir como caso clínico con la construcción del Aeropuerto Felipe Angeles. “Central avionera” fue uno de los principales adjetivos, luego, se dijo que iba a volverse un mercado con vendedores de tamales y chucherías (otra proyección de inseguridad personal), como si esto fuera malo intrínsecamente. Se acusoo al ejercito como incapaz de lograr esta mega obra en tiempo record, acusandolo de no solo incompetente sino de estar en tratos corruptos por la asignacion de la misma. Luego vino la campaña con miles de imágenes del aeropuerto a baja capacidad, como si fuera posible que una obra de infraestructura estuviera al máximo de su capacidad en el inicio (otra proyección de inseguridad y miedos). ¿Pero al final que les curó el trauma? Pues el hecho de que resultó que un concurso internacional de arquitectura nada más y nada menos que francés (oh la,la, osea no solo europeo sino que francés hay que insistir), premio al AIFA como uno de los seis aeropuertos más bellos del mundo en el Grand Prix de Versailles: insistimos oh,la,la. Aquí, comprobamos de manera ejemplar lo traumados que están y lo inseguros que son, por que al momento en que llegó el francés a decir que el aeropuerto era hermoso, de repente como por arte de magia, los comentaristas se derritieron en elogios al aeropuerto y al ejército mexicano, cuando antes no lo bajaban de central avionera y al ejército de inepto e incapaz. ¿Qué es esto sino un caso grave de inseguridad personal?
Estos casos de comentaristas y expertos son casi clínicos, porque tienen síntomas y características personales que se repiten: escuela privada nacional o extranjera; no creer en su país; denostar lo mexicano rayando en la burla; asumir que lo extanjero es siempre mejor; siempre creer que el sector privado es superior al publico; glorificar al libre mercado; fascinarse con el inglés; glorificar los títulos académicos de universidades extranjeras etc. ¿De dónde les vienen estas creencias tan negativas con respecto a nuestro país ?¿Por qué son siempre tan negativos y burlones? ¿Cuál es la característica psicológica de una persona así?... Consideramos que es obviamente una baja autoestima mexicana. Por ello analicemos un poco más que es, sus orígenes y, muy importante, quién se beneficia de ella.
¿QUÉ ES LA ARRAIGADA BAJA AUTOESTIMA MEXICANA? Es una baja valoración personal que algunos mexicanos sienten por el país y por ellos mismos por el hecho de ser mexicanos. Como explicamos en nuestro análisis anterior esta baja autoestima se expresa con la fascinación o deseo de querer ser de otro país - de los EU sobre todo-, con sentirse especial al hablar o decir algo en inglés, o por tener algún tipo de ascendencia europea, entre otras cosas. También el racismo y prejuicios que existen contra los mexicanos en otros países han alimentado esta baja autoestima, pues estos causan sentimientos de rechazo que sin una fuerte educación e identidad cultural pueden llevarnos a subestimarnos y a creer en verdad que somos inferiores.
SUS ORÍGENES EN LA CONQUISTA ESPAÑOLA. La llamamos arraigada porque tiene sus orígenes en el racismo y en el sistema de castas durante la conquista. En este periodo la discriminacion y la valoración de las personas por su origen era la estructura misma que organizaba a la sociedad, es decir, la baja autoestima era el mecanismo de rigor para delimitar los deseos y posibilidades de la gente en el sistema social.
Rodrigo Osegueda realiza una muy buena descripción de este sistema en su articulo: El sistema de castas novohispano, discriminación institucionalizada - México Desconocido (mexicodesconocido.com.mx) y afirma que “durante la Colonia los españoles dieron continuidad al sistema de distinción legal a través de los Estatutos de Limpieza de Sangre en España y América. A partir de ello, surgió toda una ideología basada en la genealogía colocando al europeo en la cima de una estructura social.”
“La baja autoestima mexicana viene de mucho tiempo atrás y se volvió esencial para creerse la mentira de que hay que comprar afuera y depender de otros. Viene desde la conquista, cuando España impuso el sistema de castas para organizar a la sociedad de la colonia, que consistía en que entre más blanco o europeo pudieras comprobar que eras, más arriba estabas en el estrato social. Este sistema perduró por siglos y dejó una huella psicológica en muchas personas y en sectores amplios de la sociedad, era un modelo en el cual la gente literalmente y legalmente era menos si no era de tal color o podía probar que tenía herencia europea.” ¿Es verdad o mentira que México puede y debe ser autosuficiente en combustibles ?🤔 (verdadomentiranoticias.com)
Por ello decimos que es una baja autoestima mexicana arraigada, porque por siglos nos organizamos como sociedad en base al modelo de inferioridad por raza y origen, que en términos prácticos dictaba que entre más mexicano, más inferior.
LA BAJA AUTOESTIMA MEXICANA, LA NUEVA VERSIÓN. El proyecto de los Chicago Boys y las universidades neoliberales.
La conquista finalizó en 1820 y para entonces México ya había pasado por el proceso de la Independencia, más adelante ocurrió el de la Reforma y después la Revolución Mexicana. En este largo periodo de tiempo el racismo y la baja autoestima mexicana seguían perdurando como sistemas, sin embargo producto de estos procesos de transformación se empezó a crear el sentimiento de orgullo nacional y la idea de que México es un país con muchos recursos y con gran capital humano, que podía desarrollarse y ser una potencia. Esto fue poco a poco y gracias a muchas luchas sociales que rindieron sus frutos a tal punto que se pudieron crear empresas nacionales y hasta el concepto de Hecho en México, que pasó a ser un sello de alta calidad y de orgullo nacional.
Hubo un cambio de paradigma. De colonia y país atrasado pasamos a tener orgullo nacional, el cual tenía una de sus máximas expresiones en las empresas paraestatales y en la idea de que si podemos como mexicanos hacer las cosas. Estas empresas demostraron igual capacidad que sus pares en otras partes del mundo; teníamos empresas nacionales de combustibles, de luz, telefonía, trenes, alimentos básicos entre muchas otras cosas.
Entonces ¿cómo es que en los años 80s todo este avance se revirtió? ¿Cómo es que se metió de nuevo la idea de que era mejor comprar lo extranjero y que el mexicano no era capaz como otros países?
A los grupos de poder financiero internacional y empresas trasnacionales no les rendía frutos el que México quisiera hacerse cargo de sus propios recursos y que se convirtiera en un país desarrollado; por ello se les ocurrió una gran idea: educar a los políticos y economistas mexicanos en las universidades estadounidenses y extranjeras para adoctrinarlos en las ideas llamadas neoliberales.
Este proyecto se puso en marcha no solo en México, de hecho empezó en Chile en los años 50, donde un grupo de estudiantes chilenos fueron becados por la Universidad de Chicago, a los cuales se les pasó a conocer como los Chicago Boys, una historia muy interesante e importante que deben de conocer todos los latinoamericanos. Chicago Boys - Wikipedia, la enciclopedia libre
La periodista Sandra Rodriguez Nieto nos platica sobre este tema: “Los «Chicago Boys», como se les conoce desde los años setenta, fueron un grupo de economistas chilenos, la mayoría formados en el Departamento de Economía de la Universidad de Chicago, bajo el amparo de Milton Friedman y Arnold Harberger, de gran influencia durante la dictadura militar liderada por Augusto Pinochet (1973-1990). Fueron los artífices de las reformas económicas y sociales que llevaron a la creación de una política económica neoliberal de mercado con orientación neoclásica y monetarista, además de la descentralización del control de la economía. Pero aunque su participación decisiva para orientar económicamente la dictadura de Pinochet es bastante conocida, su actuación en otros países de América Latina ha pasado en gran medida desapercibida.” El Chicago Boy mexicano - Jacobin Revista (jacobinlat.com)
Los grupos financieros creadores de este proyecto tuvieron muy buenos resultados en Chile con la gran ayuda de la dictadura de Pinochet y la influencia de los Chicago boys, por lo que se trasladó esta nueva estrategia a otros países de Latinoamérica, la cual era relativamente sencilla: para mantener el control y el saqueo a los países latinoamericanos solo se tiene que educar a sus políticos y economistas en sus universidades neoliberales, en las cuales se fomenta casi a nivel de fanatismo la idea simple de que lo estadounidense o extranjero es mejor y a través de esa doctrina se cimenta la idea en las mentes de estos jóvenes talentosos becados de que en México - y Latinoamérica - tenemos menos capacidad intelectual; que México es un país destinado a ser solamente un proveedor de recursos naturales, de mano de obra barata y turismo y que nunca será una país desarrollado y mucho menos una potencia. Esta fue la doctrina del poder colonial durante la conquista y se mantiene hasta la fecha. Esta idea se ha arraigado con el culto y fascinación por las universidades europeas y norteamericanas, a su cultura, sus costumbres, su idioma etc. Finalmente, consideramos que para que esta visión retrógrada sea aceptada como casi una religión por sus “víctimas” es indispensable que tengan una baja autoestima muy arraigada, la cual se les desarrolla al máximo en estas universidades, tanto que los lleva a dañar a su propio país en favor de otros.
En México los Chicago Boys fueron los que empezaron con las reformas que entregaron a privados y extranjeros casi todo el sector de las empresas paraestatales y casi la totalidad de nuestros recursos energéticos.
Los Chicago Boys más representativos en México son Carlos Salinas (bueno, este estudio en Harvard), Ernesto Zedillo, Guillermo Ortiz (exsecretario de Hacienda y exgobernador del Banco de Mexico) y Francisco Gil Diaz (exsecretario de Hacienda con Fox). El mismo Gil Diaz en una entrevista en el 2010 dice, tal cual, que Leopoldo Solis (subdirector del Banco de México, economista mexicano que estudió en Yale y que fungió como reclutador de mexicanos para la Universidad de Chicago) le dijo: “te vas a ir a estudiar economía a la Universidad de Chicago porque estoy sembrando economistas por todos lados y soy amigo de Arnold Harberger”. Este último fue profesor de la Universidad de Chicago y junto con Friedrich Hayek y Milton Friedman, se encargaron del proyecto de los Chicago Boys en Latinoamérica. Harberger explicó en un evento en el ITAM en 1999 que “la mayor parte de los miembros de este equipo en el caso mexicano estaban en el Gobierno desde la década de los años 70 y principios de los 80 y eran “sobre todo estudiantes de economía y políticas públicas que fueron al extranjero para estudios de postgrado” “Itamitas” en el poder - “Si me dicen Chicago Boy, no saben cómo lo agradezco, me parece genial": Gil Díaz - SinEmbargo MX
El proyecto de poder crear una élite de acomplejados - con sentimientos de inferioridad en relación con lo extranjero - que estuviera a cargo de la política económica en México, requería de un programa amplio y consolidado para fortalecer la estrategia de educar a jóvenes mexicanos en las teorías neoliberales, que casi nos arruinan por completo; para ello también se crearon universidades privadas en nuestro país, todas con la misma ideología anti estado y pro capital extranjero, para que de esa manera ya no fuera necesario que los estudiantes fueran a otros países a adoctrinarse. La universidad más conocida de estas es el ITAM. (Sin embargo ya casi todas las escuelas privadas tienen esta misma ideología la cual ya ha llegado hasta la UNAM).
Esta nueva versión de la baja autoestima mexicana la padecen severamente la gran mayoría de los intelectuales y expertos de hoy, como los autores de las notas que mencionamos al principio. Estos expertos, intelectuales, políticos y economistas que tienen esta arraigada baja autoestima mexicana vienen en su gran mayoría de familias de clase alta o que aparentan serlo, ya que estos son los sectores que pueden pagar las muy altas colegiaturas de las escuelas privadas neoliberales o que pueden ir a estudiar a las universidades en el extranjero, es importante mencionar que es siempre con la idea de que estarán mejor preparados. La realidad es que al final es solo una educación extranjera en otro idioma, que termina sirviendo de nada, como ya nos quedó claro después de más 30 años de neoliberalismo; porque son ideas que en la práctica chocan con la realidad de nuestro país, simplemente no sirven, van solo a ser fanatizados, gastan un montón de dinero y salen más incompetentes de que cuando entraron a estudiar. La prueba es el periodo de 1982 al 2018, el más neoliberal en la historia, donde no hubo una sola historia de éxito económico para México, al contrario la economía del país y el nivel de vida de los mexicanos se desplomaron. Nunca olvidemos que el 95% por ciento de las personas que estuvieron a cargo de esa tragedia económica en México estudiaron en escuelas privadas neoliberales o en el extranjero.
Insistimos, al final esta “educación” e ideas en las cuales los adoctrinan: simplemente no sirven, no funcionan, pues no están orientadas al desarrollo industrial de México y chocan con nuestras necesidades ya que están dirigidas sólo al saqueo tipo colonial de nuestros recursos naturales y al abuso de la mano de obra barata. Estas son las ideas económicas de los países que fueron dueños de colonias, era el modelo económico que usaban para sus territorios, aunque le pongan nombres raros como neoliberalismo o libre cambio, son solo el modelo colonial de extracción de recursos con mano de obra muy barata. Por ello, y para que este sistema les siga funcionando, necesitan mantener y alimentar la idea de que hay países y poblaciones inferiores que son menos capaces y que sólo están destinadas a ser explotadas; y los que permitirán que esto se lleve a cabo, serán las elites ricas y de gobierno, que deberán tener una profunda y muy baja autoestima para que puedan psicológicamente estar de acuerdo con este abuso.
¿QUIÉN SE BENEFICIA DE LA BAJA AUTOESTIMA MEXICANA?
Para poder responder y empezar a comprender esto, es importante prestar atención a lo que el escritor Federico Navarrete explica en este artículo de Mexico Desconocido sobre el sistema de castas durante la conquista española: «No era un sistema de clasificación sistemático. La verdad no era un sistema tan rígido. Antes que nada es un sistema de dominación política y económica. No son prejuicios raciales, porque las castas no son razas, no hay que confundir eso.» El sistema de castas novohispano, discriminación institucionalizada - México Desconocido (mexicodesconocido.com.mx) Es decir, el sistema de castas fue usado desde el principio de la conquista con la idea de dominación política y económica, para de esta manera organizar el saqueo y a la fuerza laboral para este saqueo en base al manejo del valor de las personas según su origen, estando hasta abajo el que fuera mas indio y hasta mero arriba el que era europeo puro. (Así también vivían los ricos de México durante el porfiriato, estaban tan fascinados con los ingleses y los franceses que hacían lo que ellos querían). Este es el modelo que tanto daño le ha hecho a México y el cual marcó por completo a toda la nación por siglos; de aquí viene ese atesoramiento y fascinación con lo europeo, por verse blanco o parecerlo, por poder hablar inglés, por tener título en escuela privada o mejor aun extranjera, !entre más europea mejor!
Entonces y analizando, ¿quiénes son los que se benefician de esta arraigada baja autoestima mexicana? ¿A quién le conviene que los mexicanos creamos que somos menos capaces que otros países? ¿A quién le conviene que la educación de los mexicanos sea dirigida para beneficiar a otros países o a empresas extranjeras? ¿A quién le conviene que los mexicanos creamos que necesitamos de empresas extranjeras y gobiernos extranjeros para “cuidarnos” o “cuidar” nuestros recursos? ¿A quién le conviene que México no se haga cargo de sus propios recursos e instituciones financieras? ¿A quién le conviene que México no se desarrolle y viva siempre endeudado y pagando eternamente altas tasas de interés? ¿A quién le conviene que creamos que no estamos listos para elegir a nuestros jueces? ¿A quién le conviene que creamos que hacer trenes es un desperdicio de dinero, o que tener un sistema de refinación para producir nuestra propia gasolina es un sin sentido? ¿A QUIÉN LE CONVIENE?
La respuesta es muy obvia ya, pero por si las dudas: a los grupos de poder político y financiero internacional y las empresas trasnacionales.
El tener una oligarquía mexicana que en el fondo desprecia el hecho de ser mexicana beneficia a grandes grupos extranjeros de poder político y económico que necesitan mantener un sistema colonial para sobrevivir. Son grandes corporativos, empresas transnacionales, bancos privados internacionales y organizaciones supranacionales al servicio de los anteriores como el Banco Mundial y el FMI, en fin al final son grandes consorcios financieros que manejan a su antojo a gobiernos e instituciones y que por mucho tiempo han obtenido grandes ganancias usando este sistema de saqueo, y que no parece para nada que quieran cambiar el rumbo pues sin este sistema simplemente no podrían mantener su poder y ganancias. Las únicas que pueden cambiar este rumbo, este sistema colonial de saqueo, son las poblaciones y sus gobiernos.
DEMOSTRACIÓN QUE MÉXICO PUEDE SER UN PAÍS DESARROLLADO Y QUE TIENE UN PUEBLO CAPAZ Y VALIOSO.
En los últimos años ha quedado claro que México está cambiando de dirección y está ahora orientado hacia el desarrollo, ha quedado atrás poco a poco el periodo neoliberal y sus políticas. México está retomando la tradición industrial y de desarrollo que antes nos caracterizó, con nuevos trenes, refinerías, aeropuertos, universidades, sistema de salud, carreteras, hidroeléctricas, sistemas de agua y riego etc., todo desde un enfoque de orgullo nacional y soberanía. No se puede negar que en este último sexenio AMLO le dio un gran empuje a la dignidad e identidad del mexicano, esto con los grandes proyectos de infraestructura; las reformas dirigidas al bien de la población; con la nueva autonomía y soberanía del sector energético; con las nuevas relaciones soberanas y de iguales entre países; con un comercio exterior más justo entre otras; todo bajo el nuevo modelo de gobierno llamado Humanismo Mexicano que fomenta el progreso con justicia y que retoma la dignidad y el orgullo nacional como elementos clave para el desarrollo: ”El Humanismo Mexicano se sostiene en perfecto equilibrio en dos pies, uno es el de la gran herencia cultural prehispánica que nos alimenta de virtudes excepcionales como la fraternidad, la libertad, la justicia y la honestidad: y el otro, es el de la política con dimensión social y carácter público que llevaron a la práctica como en pocos lugares del mundo, nuestros próceres, abnegados y ejemplares.” Libro Gracias de Andres Manuel Lopez Obrador pág 502.
El orgullo y la autoestima se desarrollan y suben a un lugar más alto cuando nuestra identidad está posicionada en bienes de mayor valor. No bienes físicos que poseemos de manera individual, sino en bienes que nos trascienden, que duran más que nuestras vidas físicas y que benefician a otros en el momento en que vivimos y en las generaciones futuras. Los grandes proyectos de infraestructura para beneficio de todos, el desarrollo tecnológico que hace que la vida sea mejor, los programas sociales que ayudan a los más necesitados, los proyectos de infraestructura y transporte que hacen la vida más ligera al ayudarnos a llegar más rápido a nuestros trabajos y hogares, la educación colectiva orientada a hacer el bien, el conocimiento y enseñanza de nuestra herencia cultural e histórica…entre otros muchos. Estos son bienes invaluables, no se puede calcular el valor de ellos porque simplemente es elevadísimo, por lo tanto, si la identidad y la autoestima de un país y sus ciudadanos se posiciona en este tipo de cosas, tan importantes para la mejora de la vida humana, nuestro sentido de valor personal y de importancia aumenta. Si como mexicanos nos apreciamos por estas cosas y no por otras de menor valor, nuestro sentido de importancia y responsabilidad se vuelve muy alto.
Ejemplos como el del Tren Maya y el Corredor Interoceánico son excelentes, cuya construcción fue dirigida por el Gobierno, la Marina y el Ejército Mexicano y ya son obras de infraestructura muy importantes para el transporte y la economía nacional; y además ya fue confirmado por la presidenta Sheinbaum que en 2 años el Tren Maya será también tren de carga, lo cual ayudará a desarrollar la industria y la economía en una zona del país que por muchos años estuvo abandonada. Sheinbaum confirma que el Tren Maya también será de carga; anuncia cuándo iniciará la construcción de infraestructura - Infobae
O el caso del Aeropuerto Internacional Felipe Angeles construido también por el ejército mexicano y por mano de obra mexicana y que ya fue reconocido como unos de los aeropuertos más bellos del mundo y el cual ya rompió récord de flujo de pasajeros. Reconocen al AIFA entre los 6 aeropuertos más bellos del mundo; y Sheinbaum lo celebra (forbes.com.mx AIFA ‘vuela alto’: Rompe récord en flujo de pasajeros en abril – El Financiero
Y no hay que olvidar el Tren Interoceánico, las refinerías, las nuevas universidades, hospitales,
presas y sistemas de riego, todas estas han sido obras concebidas por mexicanos y organizadas y construidas en gran parte por mexicanos. Todos estos son piezas nuevas de una identidad mexicana renovada y de una ahora alta autoestima mexicana que se está abriendo paso en la personalidad de los ciudadanos de este país. Estamos poco a poco volviendo a nuestro pasado industrializador que nos caracterizó en los años 30s hasta finales de los 70s y breves principios de los 80s.
Si a todo esto le sumamos el conocer y profundizar en la herencia cultural e histórica que nos heredaron los primeros mexicanos, con sus tradiciones filosóficas y conocimientos, nos podemos dar cuenta de que México tiene toda la capacidad instalada para estar al nivel de cualquier país desarrollado, ya que está quedando claro de que podemos desarrollar nuestros propios proyectos de infraestructura, nuestra propia tecnología, nuestro propio arte, nuestra manera propia de organizarnos socialmente y todo esto por nuestros propios medios y sin necesidad de la intervención abusiva extranjera.
Como conclusión. No hay que ser ingenuos, la baja autoestima sigue viva en muchos de nosotros, sobre todo en los estratos altos que tienen más contacto con el extranjero, pero cada vez es y son menos. Está arraigada desde la conquista y los grupos de poder político y financiero internacional han buscado maneras de renovarla, mantenerla vigente para mantener un estado de sometimiento psicológico hacia el capital extranjero, pero hay señales grandes de que esto se está revirtiendo. Es importante no perder de vista que es una tarea de todos y que regenerar nuestra autoestima como Nación puede tomar tiempo, pero es de suma importancia recuperarla pues los beneficios sociales, políticos y económicos serán muy grandes para todos.
Después de este análisis, considera usted que ¿es verdad o mentira que en México la mayoría de las clases altas y sus “expertos” sufren de una arraigada baja autoestima mexicana?🤔